Formación en mercancías peligrosas para bomberos
Sumario del tema: El calor radiado de los líquidos inflamables. Las ondas de presión en líquidos inflamables. Riesgos de metralla con líquidos inflamables. La contaminación medioambiental por líquidos inflamables. El peligro de rotura de los tanques.
El calor radiado de los líquidos inflamables
Producido como consecuencia de la combustión de los líquidos inflamables. Este calor obliga a la utilización de ropas de protección adecuadas, así como a la refrigeración de contenedores que hayan podido ser o estén siendo afectados por el mismo.
El calor radiado depende principalmente de la cantidad (superficie) de combustible inflamado y del poder calorífico del mismo.
Así mismo, la radiación es mayor cuanto mayor sea también la cantidad de impurezas que el líquido posea. En este sentido, la combustión de los alcoholes suele producir una menor cantidad de calor radiante por tratarse de líquidos con muy pocas impurezas, al contrario de lo que ocurre con productos como la gasolina o el gasoil con mucha más cantidad de residuos sólidos.
La ondas de presión en los líquidos inflamables
Producidas por la súbita combustión de una nube o acumulación de vapores inflamables en un lugar cerrado.
Las ondas de presión parten de un foco inicial donde se originan, y se propagan en todas las direcciones del espacio.
Las ondas de presión parten de un foco inicial donde se originan, y se propagan en todas las direcciones del espacio.
Las explosiones de las mezclas de aire con vapor inflamable en las proximidades del límite inferior o superior de inflamabilidad son menos intensas que las que se producen con concentraciones intermedias de la misma mezcla.
La violencia de las explosiones de vapores inflamables depende de la naturaleza de los vapores, de la cantidad de la mezcla, de la concentración de la misma y del tipo de confinamiento.
La violencia de las explosiones de vapores inflamables depende de la naturaleza de los vapores, de la cantidad de la mezcla, de la concentración de la misma y del tipo de confinamiento.
Riesgos de metralla con líquidos inflamables
Generalmente van a ser los pedazos de la cisterna o depósito que contenía el líquido inflamable o sus vapores.
El calentamiento excesivo del contenedor, puede provocar un efecto de sobrepresión en el interior del mismo que, acabe dando lugar a una explosión que puede lanzar sus restos a cientos de metros del lugar donde se encontraba inicialmente.
El peligro de rotura de los tanques debido a la presión interna cuando están expuestos a un incendio depende, en gran parte, de las características del líquido, de las dimensiones y tipo del tanque y de la intensidad y duración del fuego.
Cuanto menor sea el tanque o menor el volumen del líquido en él contenido, menor será el tiempo que tardará en producirse la explosión BLEVE.
El peligro de rotura de los tanques debido a la presión interna cuando están expuestos a un incendio depende, en gran parte, de las características del líquido, de las dimensiones y tipo del tanque y de la intensidad y duración del fuego.
Cuanto menor sea el tanque o menor el volumen del líquido en él contenido, menor será el tiempo que tardará en producirse la explosión BLEVE.
La contaminación medioambiental por líquidos inflamables
Producida a consecuencia del derrame de estos productos en el mar, ríos, lagos, etc; o bien, en la propia tierra donde, además de la contaminación de la misma, puede alcanzar el nivel freático y ser trasladada a grandes distancias.
Por otro lado, la gran cantidad de humo y gases producidos como consecuencia de la combustión de los líquidos inflamables ejerce, así mismo, un efecto muy perjudicial sobre la atmósfera. Toxicidad, corrosividad y especial reactividad.
El sulfuro de carbono, el sulfuro de metilo, el metanol o la acroleina, son ejemplos de líquidos inflamables que también presentan problemas de toxicidad.
La metilamina, la dietilamina y otras materias inflamables presentan el problema añadido de ser corrosivas.
El acetato de vinilo, el metacrilato de etilo, el estireno o el viniltolueno, son ejemplos de líquidos inflamables que además pueden producir espontáneamente una reacción violenta.
Por otro lado, la gran cantidad de humo y gases producidos como consecuencia de la combustión de los líquidos inflamables ejerce, así mismo, un efecto muy perjudicial sobre la atmósfera. Toxicidad, corrosividad y especial reactividad.
Algunos líquidos inflamables presentan otros riesgos asociados al de inflamabilidad:
Los hidrocarburos aromáticos como el benceno, el tolueno o el xileno, poseen efectos anestésicos y sus vapores pueden provocar parálisis respiratoria. Además, muchos compuestos aromáticos penetran a través de la piel y pueden ser absorbidos por los tejidos del cuerpo.El sulfuro de carbono, el sulfuro de metilo, el metanol o la acroleina, son ejemplos de líquidos inflamables que también presentan problemas de toxicidad.
La metilamina, la dietilamina y otras materias inflamables presentan el problema añadido de ser corrosivas.
El acetato de vinilo, el metacrilato de etilo, el estireno o el viniltolueno, son ejemplos de líquidos inflamables que además pueden producir espontáneamente una reacción violenta.