CARACTERÍSTICAS DE LOS LÍQUIDOS INFLAMABLES
Mercancías peligrosas para bomberos
Sumario: La presión de vapor de líquidos inflamables. Punto de ebullición de líquidos inflamables. Punto de inflamación de líquidos inflamables. Punto de autoinflamación de líquidos inflamables. Rango de inflamabilidad de líquidos inflamables.
Características físico químicas de líquidos inflamables
Existe una serie de características fisicoquímicas que es conveniente que conozcamos y tengamos presentes de cara a una intervención en la que se hallen involucrados líquidos inflamables.
1. La presión de vapor de los líquidos inflamables
Cuanto mayor sea la presión de vapor del líquido, mayor será la cantidad de vapores inflamables que éste emane a una temperatura determinada y, por tanto, mayor será el riesgo de una potencial inflamación.
En justa medida, deberemos extremar las medidas de protección controlando de forma más estricta todas las posibles fuentes de ignición.
Un ejemplo sencillo se puede establecer entre la gasolina y el gasoil.
La presión de vapor de la gasolina es de 190 mm de mercurio a 20ºC mientras que la del gasoil es de tan sólo 2,6 mm de mercurio a 50ºC.
En justa medida, deberemos extremar las medidas de protección controlando de forma más estricta todas las posibles fuentes de ignición.
Un ejemplo sencillo se puede establecer entre la gasolina y el gasoil.
La presión de vapor de la gasolina es de 190 mm de mercurio a 20ºC mientras que la del gasoil es de tan sólo 2,6 mm de mercurio a 50ºC.
Como sabemos, es mucho más fácil que se inflame un derrame de gasolina que uno de gasoil, hecho que es debido, principalmente, a la mayor presión de vapor de la gasolina que lleva consigo, como hemos comentado, una mayor emanación de vapores.
2. El punto de ebullición en líquidos inflamables
Se denomina punto de ebullición a la temperatura a la cual se iguala la presión de equilibrio del vapor de un líquido con la presión atmosférica total existente en su superficie.
El punto de ebullición normal será aquella temperatura a la cual una sustancia pasa de líquido a vapor a la presión de 1 atmósfera.El punto de ebullición está inversamente relacionado con la presión de vapor, de modo que, sustancias con una elevada presión de vapor presentan un bajo punto o temperatura de ebullición.
El poseer un bajo punto de ebullición supone dificultades añadidas a la hora de la extinción. Así, ciertos terpenos y éteres arden con una considerable ebullición de la superficie del líquido presentando una muy difícil extinción.
El poseer un bajo punto de ebullición supone dificultades añadidas a la hora de la extinción. Así, ciertos terpenos y éteres arden con una considerable ebullición de la superficie del líquido presentando una muy difícil extinción.
3. El punto de inflamación en líquidos inflamables
Se denomina punto de inflamación a la temperatura mínima a la que un líquido desprende suficiente cantidad de vapores que, en contacto con el aire, forman una mezcla capaz de arder en las proximidades de la superficie del líquido.
Cuanto menor sea la temperatura de inflamación, mayor riesgo de que se produzca un incendio en caso de accidente y, por tanto, deberemos extremar las medidas de precaución, en especial, ampliando la zona de riesgo y realizando un control más exhaustivo de las posibles fuentes de ignición.4. El punto de autoinflamación en líquidos inflamables
Punto de autoinflamación en líquidos inflamables: es la mínima temperatura por encima de la cual una mezcla de vapores inflamables, en presencia de aire, son susceptibles de inflamarse sin necesidad de una fuente de ignición externa.
Lógicamente, a menor temperatura de autoinflamación, mayor riesgo de que se produzca una combustión no deseada.
5. El rango de inflamabilidad en líquidos inflamables
Cuanto más amplio sea el mismo, y dependiendo de cuales sean sus valores límites concretos, mayor será el riesgo de que los vapores sean susceptibles de ser inflamados en una atmósfera, local o situación determinada.
Un gran número de productos, entre los cuales podríamos incluir varios de uso muy frecuente como la gasolina, el gasoil, o el tolueno, presentan valores para su límite inferior y superior de inflamabilidad que se sitúan en torno al 1% para el primero y el 7% para el segundo.
Un gran número de productos, entre los cuales podríamos incluir varios de uso muy frecuente como la gasolina, el gasoil, o el tolueno, presentan valores para su límite inferior y superior de inflamabilidad que se sitúan en torno al 1% para el primero y el 7% para el segundo.
Otros líquidos inflamables, en cambio, presentan valores bien distintos, como es el caso del alcohol metílico con el 7% para su L.I.I. y el 36% para su L.S.I.
6. La densidad del líquido inflamable
La inmensa mayoría de los líquidos inflamables son menos densos que el agua, de forma que, en cualquier situación, que entren en contacto con la misma tenderán a situarse en la superficie.
Así pues, debemos considerar esta circunstancia cuando, por una u otra razón, un derrame de estos productos alcance el mar, un río o cualquier otra área con presencia de agua.
El sulfuro de carbono es uno de los pocos líquidos inflamables con mayor densidad que el agua, y además no soluble en ésta. Los fuegos en los depósitos y derrames de estos productos pueden ser extinguidos por la separación de sus vapores y el aire mediante la formación de una capa de agua sobre los mismos.
Así pues, debemos considerar esta circunstancia cuando, por una u otra razón, un derrame de estos productos alcance el mar, un río o cualquier otra área con presencia de agua.
El sulfuro de carbono es uno de los pocos líquidos inflamables con mayor densidad que el agua, y además no soluble en ésta. Los fuegos en los depósitos y derrames de estos productos pueden ser extinguidos por la separación de sus vapores y el aire mediante la formación de una capa de agua sobre los mismos.
7. La solubilidad en el agua de líquidos inflamables
Existen líquidos inflamables solubles y no solubles en el agua.
La mayoría de los alcoholes, la acetona, y otros, pertenecen al primer grupo. Los hidrocarburos, en cambio, suelen ser no solubles en el agua, si siéndolo en disolventes orgánicos.
Considerando este aspecto podemos prever el comportamiento que va a tener un determinado producto cuando se ponga en contacto con agua. Una consecuencia clara de este hecho es la conveniencia de emplear espuma de la conocida como antialcohol en el derrame de líquidos inflamables solubles en agua.
Frente a líquidos solubles en agua también podemos emplear la extinción por dilución con agua. La solución resultante, líquido-agua, es menos volátil que el líquido sólo, según el grado de dilución con el agua, y la combustión puede cesar por dejar de haber una cantidad suficiente de vapores inflamables.
La mayoría de los alcoholes, la acetona, y otros, pertenecen al primer grupo. Los hidrocarburos, en cambio, suelen ser no solubles en el agua, si siéndolo en disolventes orgánicos.
Considerando este aspecto podemos prever el comportamiento que va a tener un determinado producto cuando se ponga en contacto con agua. Una consecuencia clara de este hecho es la conveniencia de emplear espuma de la conocida como antialcohol en el derrame de líquidos inflamables solubles en agua.
Frente a líquidos solubles en agua también podemos emplear la extinción por dilución con agua. La solución resultante, líquido-agua, es menos volátil que el líquido sólo, según el grado de dilución con el agua, y la combustión puede cesar por dejar de haber una cantidad suficiente de vapores inflamables.
Sin embargo, no puede confiarse comúnmente en la extinción por dilución debido a la gran cantidad de agua que se puede necesitar para conseguir este objetivo. Además, existe el riesgo de que pueda producirse una espumación si el líquido incendiado alcanza una temperatura superior a la temperatura de ebullición del agua.
8. La densidad de los vapores en líquidos inflamables
La inmensa mayoría de los líquidos inflamables desprenden vapores que son más densos que el aire.
Éste es un hecho a tener presente ya que los citados vapores van a situarse en las zonas más bajas del terreno, pudiendo dar lugar a bolsas susceptibles de ser inflamadas en caso de aporte de una fuente de ignición.
Éste es un hecho a tener presente ya que los citados vapores van a situarse en las zonas más bajas del terreno, pudiendo dar lugar a bolsas susceptibles de ser inflamadas en caso de aporte de una fuente de ignición.